3.9.08

La toma del Puro

Mira cómo canta, se renueva la posibilidad de hacerse saber, que novicio distraído no lleva ensordecedoramente lagartijas en los hombros, sino que florece en narices más profundas que la implicada categoría que se le inventa.
Despierta. Así como la luz se relaciona con la vocación uno advierte lo que será ignorado. Es más. Hasta la voz. El callo no se siente sólo sabe que será, pendiente de ser mí.
Hasta la corpulenta voz se escapa.
Y la razón se llama oración.
Quema, quema, organiza las soldaduras en el espacio sideral.
Conveniente. Incluso se revierte si uno se divierte en la fase lunar.

Entre las canciones uno implica, beneficios en la moneda y después se le convoca coleccionando la ornamentación del buque sentimental. pues hasta la colonia se advierte marina, y el comentario se rellena de salvado.
Distiende o atiende. El número de veces que la guitarra repite la postración del loco en su disfraz efímero. Locución abierta. Nomenclatura binomial. Desprende el orgasmo de su satisfacción inicial. Ahora, compensado por el índice de acoplamiento, canta y se renueva, como implorando a la cena que se localice en paz o se inviertan los papeles para mejorar la alegoría que tantas ocasiones uno compulsa contra el paladar abierto de la serie dos y quizás el arrullo no sea acoplarse, sino apenas rodar, como piedra en el estero.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hey, zorro,
las nueces se te quedaron demasiado pequeñas esta tarde. La selección natural de instinto-palabra se mejoró sustancialmente con la procreación del bastardo y sus unidades.
La mar es la colina. sólo hace falta distinguir el león del lóbulo y la oreja pendiente del señor Sabueso.
Tomás cantó su pensamiento.

Ciruela dijo...

Mira como goza jacarondosa

( http://mx.youtube.com/watch?v=O-1HTq7bHlc )